Una vivienda luminosa, decorada en blanco y madera con toques en negro es la protagonista del post de hoy. No es el típico binomio nórdico del blanco y negro, está mezclado con una sutileza y buen gusto como sólo, a mi parecer, lo saben hacer los australianos.
A veces las palabras sobran, ¿verdad? ¡Feliz día!